Se denomina “destination wedding” a una ceremonia de boda que requiere que
tanto los novios como los invitados se tienen que desplazar a una localización distinta, bien por que la pareja sea de países diferentes y buscan un punto en común para
celebrar su boda o bien por que se quiere celebrar una boda por todo lo alto,
juntando celebración con vacaciones.
Esta segunda opción es la más utilizada por parejas que quieren
juntar la boda con la luna de miel y es una excusa para visitar algunos de los
destinos más exóticos del planeta.
Las celebrities
son los que más utilizan esto del “destination wedding” y son las que lo han puesto de moda, empezando en 2006 con la boda
en un castillo italiano de Katie Holmes y Tom Cruise, hasta llegar al
despliegue de la boda entre Amal Alamuddin y George Clooney en Venecia este
mismo año.
Uno de los
destinos más emblemáticos y preferidos por las parejas de Hollywood es
Italia, que ha sido elegido en numerosas ocasiones para celebrar sus uniones,
como por ejemplo John Krasinski y Emily Blunt que se dieron el “si quiero” en las orillas del Lago en un
espectacular palacio de más de 400 años de antigüedad y flanqueados por montañas.
Otra boda con
mucha notoriedad fue la que celebraron Kanye West y Kim Kardashian, que después de jugar al despiste con la prensa y que se rumoreaba que se
iban a casa en Paris, al final se celebró en el Forte
di Belvedere, una villa italiana del siglo XVI.
Hay muchas otras
posibilidades como la que eligieron Behati Prinsloo y Adam Levine que
celebraron su boda en una granja orgánica en Los Cabos o la boda entre Ryan
Reynolds y Blake Lively en una antiquísima
plantación en Carolina del Sur.
Entre los españoles tenemos a la boda entre Penélope Cruz y
Javier Bardem que la celebraron en las Bahamas.
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